miércoles, 13 de mayo de 2015

Olvido (Embarraca't 2015, Figueres 30/04/15)

                                 
                                                    Embarraca't 2015: Olvido

Noche de rock en l'Embarraca't. O al menos por un rato ya que luego vienen otras cosas, más conocidas por lo que se ve. En un día sin excusas por aquello de que el día siguiente es festivo y todo eso. Tal vez, la mejor programación de la semana y de la presente edición del embarraca't. Y tan sólo por Olvido.

Aunque sé que a estas alturas no necesitan de presentación, Olvido son una banda de Roses que  llevan unos diez años de carrera y dos albums a sus espaldas, grabados en MusicLan y posproducidos en las tierras del metal oscuro escandinavas. Además están a punto de empezar por el tercero, por lo que me llega. Profesan un metal a medio camino entre lo gótico y lo oscuro (dark), características a las que podríamos sumar algunas otras.












Tanto "Neurosis de destino"(2010) como su más reciente "Luto"(2013) conforman un material de kilates en cuanto a metal se refiere, no les hacen falta grandes aspavientos en cuanto a virtuosismos gratuitos, la voz es consistente, las bases equilibradas, con detalles interesantes a las teclas y una batería contundente de momentos progresivos. No soy un experto y además estoy hablando de un género del cual suelo estar exiliado así que reduciré mis palabras a poco más que lo expuesto y os conminaré a descubrirlos por vosotros mismos. Y si no os fiais de un no-devoto como un servidor, siempre podeis acudir a la página consolidada y  especializada en el género, como es la de los compañeros de Paranoia Metal Show en su crónica de este mismo concierto y sus reseñas de los discos.

Aparte de cosechar buenas críticas y de haber tocado bastante por el país, hoy se puede decir que hace tiempo que han dejado de ser promesas o una banda emergente, para pasar a ser una realidad. O eso me ha sugerido el mismo material existente. Y esa noche estábamos ahí para corroborarlo, ya que desde tiempos de Overlook que los tenía perdidos y marcados en mi agenda para cuando tocaran por la zona. Y a eso vamos.
 

Todas las fotos de Ana Mar Lopez

Les toca abrir la noche, y el entorno es el ideal, ya que desde los primeros acordes, percibo una calidad de sonido espectacular, lo mismo que el tema de las luces. Los primeros golpes y distorsiones nos pegan en la cara y ya estamos a punto de entrar en las arenas oscuras de los Olvido.

Y ahí nos vamos a quedar enmarañados, atrapados por los insondables fondos de teclado que afloran por detrás de las afiladas garras de los dos guitarras y de la contundente base rítmica, de donde sobresale una voz  sobrecogedora. Creo que ya estoy en Mordor. Y no, no es Mordor-Jonquera, es el Mordor auténtico.

FORMACIÓN
A un primer golpe de ojo, creo que veo cambios en la formación, a bote pronto y con miedo de equivocarme, los dos guitarras titulares (Nacho y Victor) y al que no distingo más allá, porque la vista no me alcanza, pero diría que no se trata del master mr.berengena.

PERFORMANCES
Supongo que es un handicap para cualquier batería el tener que suplir al master, pero diré que sin tenor a parecer demasiado poco observador, diría que esa papeleta la supera el nuevo batería Oriol Pujolras, ya que creo que aporta una contundencia por un lado y una técnica por otro que bordean la matricula de honor. Pero tampoco voy a ser un sacrílego, Berengena seguirá siendo berengena, por allá por donde pase.
 

Las guitarras sólidas, con la actitud necesaria y como hemos dicho, sin la "paja" o aquello tan cansino que a veces significa tener que soltar/soportar sí o sí solos largos e hipervirtuosos metidos con calzador cada 2 o 3 minutos. O sea, son depuradas, concisas, consistentes, y en pos al mensaje y el hilo musical con sus sensaciones asociadas, y eso es una virtud en este género. Casi nada. Excelentes. Así como un bajista que también lo vive.

La voz de Nestor raya la perfección. Y pese al (cansino) parecido que todos  le suelen sacar comparándolo a la tesitura de Bunbury (ciertamente se parece), diría que Nestor a diferencia del zaragozano, también tiene otros registros interesantes como el semigutural o algunos graves profundos de los que echa mano en algun que otro momento. Y tampoco cometeré herejía diciendo que lo mejora. No, pero que estos recursos los usa y en cambio en Bunbury no los escucharemos precisamente a menudo.


ACTITUDES
Salta a la vista que Nestor y  Ernest (bajista)  tienen tablas. Se les nota por su soltura, se mueven, posturean. Y los guitarras, aunque menos a menudo, también se pasean y sacuden sus melenas. Al teclista Daniel Ruiz se le ve menos, por aquello de lo estático del instrumento, pero también lo vive. Creo recordar que por aquellos entonces solía llevar 2 teclados triton, y veo que ahora "sólo" lleva sinó he visto mal un M50.En fin, no importa la cantidad sinó la calidad, y sus colchones de pads, cuerdas y pianos redondean la propuesta de los de Roses. Aporta esa magia y ese misterio a los temas y los impulsa hacia el limbo de lo insondable.

PÚBLICO
En fin, no sé a vosotros, pero si sumamos tan buen material y tan buena actitud la cosa no es que pinte bien, sinó es que consiguen que la gente se vaya acercando durante el concierto, cosa que no suele ser frecuente a menos que la banda despierte interés inclusive en aquellos que tan sólo andan tomando algo o que esperan a las siguientes actuaciones de la noche. Dicho así suena un tanto indiferente, pero lo cierto es que pocas veces se produce: es la magia de los Olvido y sus hechizos musicales. Difícil resistirse.

La sorpresa llega cuando en un par de temas, como para poner el colofón a una gran actuación, sale Nessie a cantar algunas partes y corear la versión de "la mataré". Me encanta ver a dos grandes vocalistas retroalimentandose sin destacar ninguno sobre otro, y además la tesitura de Nessie expande el alcance de las canciones, a aquello de multiplicar el punch gótico de los temas, catapultándolo hacia el más allá, no del Olvido, sinó incrustándolo en el recuerdo de un gran concierto.

Si decía que eran una banda consolidada antes de escucharlos en vivo, después  me reitero. Para mí son una realidad, un referente dentro del panorama metalero que nos gustaría ver atravesar fronteras sencillamente porque se lo merecen. Si no lo han hecho ya, será porque no han nacido ni en Bergen ni en Ostersund ni tampoco en el "otro norte" americano como Seattle o Canadá. Porque entonces ya haría tiempo que andarían cerca de la élite.

Así lo digo. Así me parece, pese a la reiteración, un concierto inOlvidable. Me rindo al reino de Olvido, la oscura noche y las tinieblas espartanas. ¡Volveré!






     Y volveré a dar las gracias a Ana Mar Lopez por cedernos sus fotos para este post.








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